Uno de los mayores problemas de salud y ambiente con los que se enfrenta Guatemala en la actualidad es la recolección, manejo y disposición final de los desechos sólidos provenientes de hogares, industrias y comercios.  El artículo 68 del Código Municipal señala que es competencia de cada municipio la gestión de la basura, a excepción de los residuos sólidos provenientes de hospitales, los que por su peligrosidad, daño irreparable al medio ambiente y potenciales riesgos a la salud de los humanos, tienen su propia normativa. En Guatemala, no es una costumbre, ni una obligación, la clasificación de la basura antes de ser recolectada, por lo que son los recolectores de la misma quienes la separan y clasifican. 

El Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (“MARN”) estimó en 2018 que en el país la generación de residuos y desechos sólidos per cápita era de 0.52 kilogramos por habitante al día[1]. La mayoría de esos desechos no son tratados de la manera adecuada, muchos de ellos terminan en vertederos ilegales, así como en las calles, ríos y océanos, afectando la diversidad biológica.

La pandemia del coronavirus COVID-19, ha provocado un incremento en el uso de mascarillas, guantes y, en general, todos aquellos materiales de protección, esto sin mencionar el aumento en el uso de desinfectantes y su consecuente desecho, pues como medida de prevención ante esta pandemia, la utilización de estos productos es fundamental, y los mismos al no ser reutilizables, deben de ser desechados frecuentemente, por salud e higiene.

La Ley de Manejo de Desechos Sólidos Hospitalarios señala quienes son los entes responsables para el manejo de los desechos peligrosos, por la peligrosidad de estos, es de suma importancia que su disposición final sea adecuada. Sin embargo, por la crisis sanitaria que nos enfrentamos, han aumentado la utilización de equipos de protección en hogares, comercios e instituciones públicas, y por ende ha aumentado considerablemente este tipo de desechos, desechándose como si estos fueran basura común y corriente, por lo que este tipo de desechos no se está manejando de la forma adecuada, pudiendo causar un segundo foco de contagio, que las autoridades municipales ni de salud han analizado, ni tampoco se han preocupado por atender.  El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente recuerda que la gestión ineducada de residuos médicos y peligrosos de esta crisis sanitaria podría desencadenar un efecto rebote, en mi opinión no solo el mal manejo de los residuos médicos puede ocasionar esto, el mal manejo de los desechos provenientes de los hogares y comercios también pueden causar el “efecto rebote”, lo cual sería perjudicial para Guatemala.

El Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales en la Guía Práctica para el Manejo de Residuos y Desechos Sólidos comunes ante la Pandemia Covid-19, establece que las personas que estén involucradas en la prestación del servicio de recolección y trasporte de disposición final de los desechos municipales deberán de contar con equipo de protección personal. Se insta a que se realicen campañas de información hacia los trabajadores sobre el riesgo de estos residuos, indicando que se debe de prever la continuidad del servicio, y que una vez recolectados, se dirijan a su disposición final. El problema es que estos trabajadores, no pueden identificar qué desechos son los sanitarios, y cuáles no, por lo que todos los desechos terminan en el mismo lugar y los recolectores están en un grave riesgo de contagio. 

Se debe considerar que “el manejo inadecuado de estos desechos podría desencadenar un efecto de rebote y otras consecuencias en la salud humana y al medio ambiente, por lo que su gestión y disposición final de forma segura es vitar como parte de una respuesta de emergencia efectiva”.[2] Guatemala, no cuenta con un manejo de desechos sólidos adecuado, el sistema de recolección de basura es ineficiente por lo que esto provoca que los basureros sean ineficientes, además que existen miles de basureros ilegales, solo en el área del lago de Amatitlán existen aproximadamente 179 basureros ilegales, por lo que esto hace que la disposición final adecuada sea imposible. Un claro ejemplo que demuestra el mal manejo de los desechos provenientes de esta crisis sanitaria es el aumento de basura de los desechos del COVID-19 que han aparecido en el Lago de Amatitlán. 

Recomendaciones para prevenir un segundo foco de contagio.

Los ciudadanos debemos de ser conscientes de cómo desechamos los residuos generados en el hogar, en comercios y en oficinas. No es un secreto que debido a la pobreza extrema con que se enfrentan muchos guatemaltecos, muchos utilizan los vertederos de basura como un ingreso, e incluso muchos como una forma de alimento. Por lo que se deben de seguir las recomendaciones para el manejo de estos desechos, para la protección de salud de todos los seres humanos, así como el medio ambiente.

El Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales señala ocho puntos que se deberán de seguir para la recolección, manejo y disposición final de estos residuos[3]:

1. Al momento en que se desechen las mascarillas, guantes y toallas húmedas, estas deben de ser depositadas en los servicios sanitarios. En mi opinión estos residuos deberían de desecharse antes de ingresar a cualquier hogar u oficina, a excepción de la mascarilla, que deberá de quitarse hasta el momento en que se encuentre en un lugar seguro.
2. Se deberá de colocar una bolsa plástica en la basura, el bote de basura deberá de ser desinfectado a diario cambiando la bolsa.
3. Se debe de procurar que no se mesclen, las mascarillas, guantes y otros desechos, con los desechos del hogar, industria, los comercios, etc.
4. La bolsa deberá de ser cerrada, e identificada como “desechos sanitarios”, se recomienda que está bolsa tenga distinto color, la cual deberá de ser inmediatamente al contenedor general del hogar, industria, comercios, etc., se recomienda por lo menos mantener 72 horas las bolsas de desechos sanitarios, si esto no es posible, las bolsas deberán de ser desinfectadas.
5. No se deberá de tirar ningún residuo a la vía pública, ni tampoco acumular este tipo de residuos en las calles.
6. Después de este proceso se debe de lavar las manos con agua y jabón, por lo menos por veinte segundos.
7. El material que pueda ser reutilizable se debe de almacenar en un lugar adecuado, teniendo que realizar el proceso de desinfección, para que pueda ser llevado a los centros de acopio, así evitar que las personas manipulen estos reduciendo el riesgo de contaminación. En caso se hiciera el reciclaje, se deben de tomar todas las medidas preventivas para la protección de las personas que realizan la separación.

• El almacenamiento temporal de los desechos deberá de estar en un sitio que no se encuentre al aire libre, mientras se recolecta y se lleva a la disposición final.

Daño irreversible a la salud y medio ambiente

Es importante que todos los ciudadanos de Guatemala, tengamos conciencia al momento de desechar estos residuos, debido a que estos contienen flujos corporales y otros materiales contaminados. Los protocolos señalados por la ONU pueden no ser cien por ciento efectivos, debido a que estos protocolos están diseñados para los residuos de origen hospitalario, pero estos contienen pocas indicaciones de aquellos contaminantes provenientes del hogar. En Guatemala esto causa daños irreparables al medio ambiente y, por ende, a la salud.

Desde mucho antes de la pandemia, la contaminación era ya un grave problema y ahora, con la mala gestión sanitaria contra el coronavirus, estos desechos se suman a la contaminación de los océanos, ríos y zonas costeras. La Organización Oceans Asia descubrieron en las playas de archipiélago de Soko “miles de mascarillas usadas, con toda posibilidad utilizadas en los últimos meses por la población y personal sanitario como protección del nuevo coronavirus COVID-19”.[4]

El no tener un plan de manejo de desechos domiciliarles y de industria provenientes de esta crisis, causa serios daños al medio ambiente y la salud, los cuales son imposibles de cuantificar. La Municipalidad de Guatemala, debe de preocuparse en como manejar este tipo de desechos, debido a que no existe actualmente un plan de emergencia por parte de la municipalidad sobre la recolección, tratamiento y gestión final de los residuos. Con la llegada de las lluvias a Guatemala, estos desechos terminan en nuestros lagos, mares y ríos, ocasionando una contaminación grave, esto es provocado muchas veces por los basureros ilegales, y por la gente que tira la basura en la calle. Es de suma importancia que los ciudadanos de Guatemala califiquen este tipo de desechos como peligrosos, colocándolos aparte, con un color distinto, esto para proteger a las personas que trabajan en la recolección de basura, y su clasificación, así como a las personas que utilizan el basurero como una fuente de ingresos. En un país donde el sistema de salud está colapsado desde hace varios años, es imperdonable que no exista un plan de manejo para este tipo de desechos provenientes del COVID-19, las autoridades se han preocupado por prevenir el contagio, pero si los desechos domiciliarios y de la industria, no son tratados de una forma correcta y su disposición final no es la adecuada, nos enfrentaríamos a un segundo foco de contagio que las autoridades han dejado pasar, por lo que la gestión y disposición final es necesaria para poder dar una respuesta de emergencia efectiva.   Esto puede tener efectos negativos al medio ambiente y la salud, debido a que, si no contamos con medio ambiente sano, no podemos tener una vida sana y por ende la economía se ve afectada. Se debe de impulsar políticas para el manejo de desechos sólidos, debido a que el daño al medio ambiente es irreparable e irreversible, perjudicando a las generaciones presentes y más a las futuras

[1] Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (2018), Guía para la Identificación Gráfica de los Residuos Sólidos Comunes. http://www.marn.gob.gt/Multimedios/13196.pdf.

[2]  Organización de las Naciones Unidas (2020, Marzo 24), La gestión de residuos en un servicio público esencial para superar la emergencia de COVID-19. https://www.unenvironment.org/es/noticias-y-reportajes/comunicado-de-prensa/la-gestion-de-residuos-es-un-servicio-publico-esencial

[3] Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales, (2020), Guía Práctica para el manejo de residuos y desechos sólidos comunes ante la Pandemia COVID-19. https://www.marn.gob.gt/Multimedios/16647.pdf

[4] ELCACHO, JOAQUIM, (2020, MARZO 13), Descubren miles de mascarillas convertidas en residuos en islas deshabitadas. https://www.lavanguardia.com/natural/20200313/474107668765/impacto-ambiental-coronavirus-covid-mascarillas-residuos-contaminacion-playas-china.html.

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Guatemala, 13 de abril de 2020

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ART 4 – 2020
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